¿Qué es la alimentación autorregulada o BLW?

A partir de los 6 meses, los pediatras recomiendan comenzar a introducir los primeros sólidos en la dieta del bebé. Decirlo es fácil, pero hacerlo ya es otro cantar. Hay muchas teorías sobre cómo iniciar la alimentación complementaria, y una de ellas es el Baby Led Weaning, que propone que sean los niños los que libremente vayan descubriendo los alimentos sin pasar por la fase de purés y triturados.

Este método, que aunque no tiene una traducción literal al español se ha denominado de distintas formas como “alimentación autorregulada” y “alimentación complementaria a demanda”, fue ideado por la nutricionista Gill Rapley, que plasma sus ideas en el libro Helping your baby to love good food (El niño ya come solo, en español). 

Si quieres que tu hijo aprenda a comer con el método Baby Led Weaning, simplemente debes ofrecerle la comida en pequeños trozos, y dejar que sea él mismo el que explore, el que se la lleve a la boca y vaya probando nuevas texturas y sabores. No te preocupes de que se ponga todo hecho un asco (aunque, eso sí, protege las alfombras y demás muebles de alrededor… la comida puede salir disparada en cualquier momento), lo importante es que el niño aprenderá a comer, de una manera mucho más natural y sin pasar por la fase de papillas.

El Baby Led Weaning aporta otros beneficios: fomenta la confianza y la seguridad en el bebé, ayuda a desarrollar habilidades de coordinación y evita actitudes melindrosas ante las comidas.

 

Beneficios

Puesto que, en una situación ideal, los niños continúan tomando el pecho, no es necesario preocuparse de los alimentos que toman y de sus cantidades, ya que la leche materna ofrece todo el aporte nutricional necesario. Al principio, hasta el año, es más un método para educar que para alimentar, ya que su principal fuente de alimento sigue siendo la leche materna. De esta manera, se le permite al bebé descubrir sabores, texturas, colores y olores en la comida y le ayuda a desarrollar la coordinación ojo-mano y la masticación”,

Otros beneficios que acompañan a este método de alimentación son estimular la psicomotricidad, intervenir en un descenso del índice de sobrepeso y obesidad en edades futuras, fomentar la aceptación de nuevos alimentos por parte del bebé, dotar al mismo de una independencia muy favorable para su desarrollo o favorecer la identificación de todos los alimentos por separado, de gran utilidad en el ámbito del aprendizaje.

 

Lo que sí es importante es ofrecer los alimentos de uno en uno, de esta forma se puede ver si hay reacciones alérgicas. Otras recomendaciones son, al comenzar, hacer las verduras al vapor para que los trozos estén más blanditos, y empezar por alimentos fáciles de agarrar con las manos.

 

¿No se atragantará?

Según Baby Led Weaning, las posibilidades de atragantarse son las mismas que con otro tipo de métodos, pues en ellos también se ofrece comida al bebé en trozos – simplemente aquí nos saltamos la fase de los purés-. Lo que hay que hacer es seguir unas mínimas pautas de seguridad y, sobre todo, tener mucha paciencia. Lo bueno es que, como el bebé come lo que le apetece sin ser forzado a probar nada y controla lo que se lleva a la boca, aprenderá también a comer de forma segura.

 

Consejos

Aunque parezca un simple método de alimentación, no basta con poner la comida delante del niño. Para introducir correctamente el BLW, hay que seguir unas pautas y consejos sumamente valiosos.

 

  • Como el niño debe coger los alimentos con sus propias manos, es aconsejable que los trozos sean de un tamaño superior a su puño -preferiblemente en tiras, al menos al principio-. De esta forma, podrá chuparlo sin miedo a que se atragante. También podemos incluir ingredientes más pequeños, como el arroz o los guisantes, pues en principio no debe tener problema para tragarlo correctamente.
  • Uno de los puntos más significativos del BLW es que sea el bebé quien decida lo que come y cuando come. Por ello, en lugar de darle la comida, ofrécesela.
  • Tampoco es conveniente tratar de convencerlo de que siga comiendo si ya ha parado, pues debe ser él el que decida cuando hacerlo. Además, puede significar que ya está saciado.
  • “Incluye al bebé en las comidas familiares siempre que puedas y cuando sea posible, ofrécele la misma comida que estés comiendo”, incluyen desde BLW Recetas.
  • Hay que darle agua durante las comidas a pesar de que las primeras veces la rechace, algo muy común si todavía se alimenta de leche materna.
  • Como hemos visto anteriormente, su postura debe ser erguida y estable, frente a la mesa o en una trona, y debe tener espacio suficiente como para utilizar las manos libremente. Además, lo mejor es aprovechar esos momentos en los que no esté cansado o tenga hambre, así se concentrará mejor en lo que está haciendo.

 

Y por último, y no menos importante, sigue ofreciéndole el pecho o el biberón como siempre.

La leche es la principal fuente nutricional del bebé hasta que tiene un año.

Cuando el bebé necesite menos leche, reducirá las tomas por sí mismo.